La psicopatía es una forma extrema de comportamiento antisocial, con una prevalencia de aproximadamente el 1% en la población general, y del 10 al 30% entre los delincuentes encarcelados. Se sabe que la psicopatía es fuertemente hereditaria, pero hasta ahora no se sabía si estaba asociada a una expresión anormal de genes o proteínas en las neuronas.
En el estudio recién publicado, los investigadores utilizaron tecnología de células madre para analizar la expresión de genes y proteínas que se han asociado a la psicopatía. Las células de la piel de los participantes en el estudio se utilizaron para crear células madre pluripotentes, que luego se diferenciaron en neuronas corticales y astrocitos. La población del estudio estaba formada por delincuentes violentos psicópatas y controles sanos. Dado que la psicopatía iba acompañada del abuso de sustancias, la población del estudio también incluía a personas no psicópatas que abusaban de sustancias. Esto permitió a los investigadores determinar qué anomalías se asociaban exclusivamente a la psicopatía.
El estudio muestra que la psicopatía está asociada a fuertes alteraciones en la expresión de genes y vías moleculares relacionadas con la respuesta inmunitaria. Varios de estos genes también se han relacionado con el autismo. En las neuronas, la psicopatía se asoció con una marcada regulación al alza de RPL10P9 y ZNF132, y a la baja de CDH5 y OPRD1. En los astrocitos, RPL10P9 y MT-RNR2 estaban regulados al alza. La expresión de estos genes explicaba el 30-92% de la varianza de los síntomas psicopáticos. La psicopatía también se asoció con una expresión alterada de proteínas relacionadas con el metabolismo de la glucosa y el sistema opioide.
Varios estudios anteriores han sugerido que el comportamiento violento y psicótico se asocia con alteraciones en el metabolismo de la glucosa y la neurotransmisión opioide. Los nuevos hallazgos apoyan la idea de que el funcionamiento anormal del sistema opioide es un factor subyacente a la psicopatía. Esto sugiere que el uso de inyecciones de larga duración de naltrexona o buprenorfina para equilibrar el sistema opioide podría ser un tratamiento factible para la psicopatía.