En 2018, Facebook alcanzó los 1.800 millones de usuarios diarios, lo que es enorme si se piensa en el potencial que tiene para las empresas y los profesionales del marketing por igual.
Sin embargo, aunque ciertamente parece ser un gran lugar para publicitar tu negocio, no es para todos, y definitivamente vale la pena echar un vistazo a los pros y los contras de la plataforma antes de decidir si usarla o no.
Gran potencial de audiencia
Como se mencionó anteriormente, la audiencia en Facebook es enorme. De hecho, ninguna otra red social se le acerca. La mayoría de las empresas deciden hacer de Facebook su prioridad número uno por esta razón.
Fantásticas capacidades de segmentación
Si decides seguir el camino de los anuncios PPC en Facebook, definitivamente te impresionará lo fácil que es llegar a tu público objetivo. Gracias a toda la información que Facebook extrae de sus usuarios, puedes anunciarte no sólo a determinados grupos de edad y géneros, sino también a personas con determinadas profesiones, a personas que disfrutan de ciertos programas de televisión e incluso a personas que han comprado recientemente una casa en Nebraska. Ninguna otra red social se acerca a la segmentación publicitaria específica.
Puedes hablar directamente con tus clientes
No todos los clientes quieren visitar el blog de una empresa o suscribirse a un boletín de noticias de la misma para recibir actualizaciones y ofertas; muchos prefieren ver estas cosas cuando entran en las redes sociales.
Además de dirigirse directamente a quienes están interesados en sus productos o servicios, también puede entablar conversaciones con ellos y averiguar qué les gusta y qué no les gusta de su empresa. A continuación, puedes responder directamente a los comentarios, lo que te ayudará a reforzar tu marca y a crear autoridad.
Pay to Play
Mientras que en el pasado, Facebook era un gran lugar para conseguir atención orgánica, hoy en día es más bien un espacio pay to play. La gran demanda de espacio publicitario en el sitio y el hartazgo de los usuarios por la cantidad de empresas que hay en él han provocado la disminución del alcance orgánico. Por ello, los que quieren tener éxito en el sitio tienen que pagar por anuncios que se dirijan específicamente a su público objetivo.
Es fácil que tu página se vaya al garete
Todo negocio se encuentra con algunos clientes descontentos de vez en cuando, pero uno de los principales problemas de Facebook es lo rápido que pueden apoderarse de tu página. Desde dejar reseñas negativas hasta publicar comentarios negativos en cada publicación que hagas, pasando por involucrar a sus amigos, puede ser difícil controlar y mantener una reputación en el sitio. Incluso algunas grandes empresas, como Clockwork Digital Agency, han decidido eliminar su presencia en el sitio después de experimentar esto de primera mano. A veces no merece la pena el disgusto.
Requiere compromiso
Por último, es importante tener en cuenta que llevar una página de Facebook requiere compromiso. Esto puede estar bien para las grandes empresas que pueden contratar a un gestor de redes sociales, pero las pequeñas pueden no tener el tiempo o la energía para mantener sus páginas actualizadas e interactuar con regularidad. Si no tienes tiempo para mantener tu página actualizada, quizá sea mejor que utilices otras redes por el momento.
Facebook puede ser una gran herramienta de marketing, pero como ocurre con cualquier decisión empresarial, siempre es conveniente sopesar los pros y los contras antes de lanzarse de cabeza.