El agutí es un tipo de coloración del pelaje en el que cada pelo muestra dos o más bandas de pigmentación. Como resultado, el aspecto general del pelaje del agutí suele ser gris o marrón apagado, aunque también es posible el amarillo apagado.
El pelaje agutí se caracteriza por una apariencia de estar compuesto por pelos de diferentes colores, separado de marcas definidas (aunque el agutí puede aparecer en combinación con otras marcas, como manchas, rayas o parches). Este efecto se debe a que son visibles diferentes porciones de cada pelo, de manera que se ven diferentes colores de la banda del pelo, a pesar de que los pelos tienen en realidad una coloración similar. Este efecto produce una apariencia muy distintiva, finamente «moteada», similar al pelo «sal y pimienta», así como un efecto iridiscente muy similar al de la seda disparada que hace que el color general parezca cambiar sutilmente dependiendo del ángulo de la luz o cuando el animal se mueve.
El pelaje de agutí es la pigmentación de tipo salvaje para muchos mamíferos domesticados. Es un rasgo característico muy reconocido de varios animales, incluidos muchos cánidos salvajes, conejos salvajes y el homónimo agutí.