Los cambios en la dieta y el estilo de vida y los medicamentos pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol en la sangre.

Medicamentos

Para las personas que tienen el colesterol peligrosamente alto, los médicos suelen recomendar medicamentos para ayudar a bajar la presión arterial.

El tratamiento estándar suele comenzar con estatinas. Estos fármacos ayudan a reducir la cantidad de colesterol que produce el organismo. También reducen la inflamación alrededor de las placas de colesterol.

Esto reduce el colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL), aumenta el colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL) y reduce los niveles de triglicéridos.

La Asociación Americana del Corazón (AHA) también señala que las estatinas son el único tipo de fármaco para reducir el colesterol que las investigaciones han relacionado directamente con una reducción del riesgo de acontecimientos importantes como un ataque al corazón o un accidente cerebrovascular.

Dicho esto, las estatinas tienen algunos efectos secundarios, que pueden ser peores en dosis más altas.

También pueden ser necesarios algunos otros medicamentos, dependiendo de los factores de riesgo subyacentes de la persona. Otros medicamentos pueden incluir:

  • Resinas: Estos fármacos estimulan al organismo para que elimine el exceso de colesterol.
  • Inhibidores selectivos de la absorción del colesterol: Ayudan a impedir que el organismo absorba el colesterol.
  • Inhibidores de la PCSK9: Reducen el colesterol LDL al unirse a las proteínas del hígado.
  • Fibratos: Estos fármacos se dirigen a los triglicéridos de la sangre y los reducen.

Los suplementos como la niacina y los ácidos grasos omega-3 también pueden desempeñar un papel.

Una persona debe hablar con un médico para encontrar una medicación para el colesterol que le funcione.

Cambios en la dieta y en el estilo de vida

Los cambios en la dieta y en el estilo de vida son la clave para conseguir cambios duraderos en los niveles de colesterol.

Aunque no producen resultados tan rápidamente como los medicamentos, una persona puede notar que sus niveles de colesterol descienden en sólo unas semanas o meses si sigue un plan de dieta y estilo de vida saludables.

Aumentar la ingesta de alimentos vegetales

Los alimentos vegetales son ricos en vitaminas y nutrientes, y carecen de colesterol.

La mayoría de los alimentos vegetales también carecen de grasas saturadas, que pueden aumentar el colesterol en el organismo.

Una revisión publicada en Nutrition Reviews señaló que las personas que seguían dietas vegetarianas tenían niveles de colesterol significativamente más bajos en comparación con los omnívoros.

Los autores también señalaron que algunas dietas específicas que utilizan alimentos vegetales podrían causar efectos más fuertes.

Por ejemplo, una dieta rica en fibra soluble, esteroles vegetales y fuentes de proteínas vegetales, como la soja y los frutos secos, redujo el colesterol LDL en una media del 28,6% en sólo 4 semanas.

Estos efectos se mantienen a largo plazo. Una revisión en Progress in Cardiovascular Diseases estimó que este tipo de dieta reduce el riesgo de 10 años de enfermedad coronaria en aproximadamente un 13%.

Las personas que necesitan reducir su colesterol rápidamente pueden trabajar con un dietista para crear un plan de dieta específico.

Aumentar la ingesta de fibra

Aunque añadir alimentos vegetales a la dieta aumenta la ingesta de fibra de forma natural, también puede ser útil tomar un suplemento de fibra o una bebida de fibra de venta libre para ayudar al organismo.

La fibra mantiene el sistema digestivo sano y puede ayudar a evitar que el cuerpo absorba el colesterol.

La AHA señala que una dieta rica en fibra por sí sola puede reducir los niveles de colesterol de una persona hasta en un 10%.

Evitar las grasas trans

Evitar las grasas trans de los alimentos como los fritos, los alimentos de consumo habitual y los productos de panadería es importante para la salud del colesterol.

Las grasas trans son procesadas químicamente y elevan los niveles de colesterol en el cuerpo.

Limitar las grasas saturadas

Las grasas saturadas no contribuyen al colesterol directamente. Sin embargo, activan el hígado para que produzca más colesterol. Esto puede aumentar los niveles de colesterol.

La AHA recomienda limitar las grasas saturadas al 5-6% de la ingesta calórica diaria. Eso supondría entre 100 y 120 calorías de grasas saturadas para una persona que ingiera 2.000 calorías al día.

Deje el tabaco

Los fumadores de tabaco suelen tener niveles más bajos de colesterol HDL a la vez que presentan niveles elevados de otros factores de riesgo, como los triglicéridos en sangre.

Dejar el tabaco puede ayudar a elevar los niveles de colesterol HDL y a equilibrar el colesterol total.

Ejercicio

El ejercicio regular es una parte importante de la reducción del colesterol porque puede ayudar a elevar el colesterol HDL al tiempo que reduce el colesterol LDL.

El ejercicio también ayuda a controlar otros factores de riesgo de enfermedades cardíacas, como la pérdida de peso y el fortalecimiento del corazón.

Es importante tener en cuenta que se trata de cambios a largo plazo y no de soluciones rápidas para el colesterol alto.

Sin embargo, las personas que se ciñen a estos cambios pueden ver resultados notables durante períodos más largos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.