La Organización Mundial de la Salud estima que 124.000 personas murieron de tuberculosis en Sudáfrica en 2016 (unas 330 diarias). Es la principal causa de muerte del país, y se ha agravado mucho por la epidemia de VIH: más del 80% de las personas que murieron de TB en 2016 también estaban infectadas por el VIH. Las personas con sistemas inmunitarios comprometidos tienen un riesgo mucho mayor de enfermar de tuberculosis. En 2016, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que cerca del 40% de las personas con tuberculosis (TB) estaban «desaparecidas». Esto significa que en todo el mundo hay más de 4 millones de personas con TB que nunca han recibido un diagnóstico o un tratamiento adecuado. El modo de transmisión de la enfermedad solía requerir que los afectados estuvieran aislados mientras estaban infectados y eran contagiosos; el tratamiento implicaba largas estancias en el hospital, con pérdida de ingresos para los adultos. En consecuencia, muchas personas siguen adoptando una postura de negación y retrasan la atención o buscan una atención de menor calidad a través del sector privado o de los curanderos tradicionales. La tuberculosis puede curarse sin necesidad de una estancia en el hospital y sin apenas afectar al trabajo o a los miembros de la familia.
El objetivo principal de este día de concienciación es educar e informar a la gente sobre la realidad de la enfermedad y su tratamiento para, en primer lugar, desestigmatizar la tuberculosis y, en segundo lugar, fomentar las pruebas. Para acabar con la epidemia de tuberculosis, es necesario encontrar, diagnosticar y tratar eficazmente estos casos «perdidos» de personas con tuberculosis.