TeamViewer es una aplicación de software basada en Internet que se utiliza para el acceso remoto, la asistencia, el intercambio de archivos y las teleconferencias. Permite a un usuario ver la pantalla de otro ordenador y realizar acciones como si estuviera directamente frente al dispositivo nativo. Esto es útil para los usuarios que tienen dispositivos personales que utilizan en casa y dispositivos emitidos por la empresa que utilizan en el trabajo; cuando la aplicación TeamViewer está instalada en ambos dispositivos, un usuario puede acceder a los archivos y completar las tareas en su ordenador de trabajo desde casa o viceversa.
TeamViewer es compatible con los sistemas operativos Windows, Mac, Linux y Chrome, así como con los dispositivos móviles y tabletas Android, Apple y Windows. Está disponible como descarga gratuita para usuarios individuales, y las empresas comerciales pueden obtener la licencia de TeamViewer como suscripción mensual.
Preocupaciones por la seguridad y la privacidad
TeamViewer utiliza un estándar de cifrado AES de 256 bits reconocido por la industria, así como una protección de fuerza bruta, por lo que muchos usuarios se sienten cómodos y protegidos cuando acceden o comparten información potencialmente sensible. Sin embargo, varias brechas de seguridad de TeamViewer y preocupaciones de privacidad se ciernen en la historia reciente.
En 2016, numerosos usuarios de TeamViewer describieron tomas de dispositivos no autorizadas en las que la aplicación TeamViewer se lanzó y pareció ser operada por un usuario remoto desconocido. Algunas cuentas informaron que el usuario o usuarios remotos abrieron los navegadores web, aprovecharon las contraseñas guardadas y accedieron y vaciaron las cuentas de PayPal. TeamViewer informó que las brechas se debieron a contraseñas débiles y a la falta de autenticación multifactor de los usuarios.
De nuevo en 2017, un error en la actualización del software de TeamViewer presentó una oportunidad para que los hackers tomaran el control de la sesión de otro usuario y explotaran el dispositivo cautivo para obtener archivos sensibles u otra información. Aunque los efectos fueron menos generalizados y se desplegó una actualización parcheada con relativa rapidez, la repetición del delito un año después hizo que muchos usuarios perdieran la confianza en la seguridad de TeamViewer.