Para detectar los anticuerpos del VIH, los investigadores utilizaron el ensayo inmunoabsorbente ligado a enzimas (ELISA). A pesar de que los autores señalan que se sabe que la saliva humana inhibe la infectividad del VIH in vitro, se carece de información sobre la transmisión del VIH por secreción oral porque la tasa de dicha transmisión es muy baja.

Para las muestras de saliva del grupo de estudio, los resultados del ELISA fueron un 99% sensibles y un 100% específicos para los anticuerpos contra el VIH -hubo un falso positivo-, mientras que para las muestras de suero fueron del 100% para ambas medidas. La media (DE) de las edades de los pacientes de los grupos de estudio y de control fue de 34,14 (11,51) y 31,02 (7,15) años, respectivamente.

Una prueba t independiente que se realizó en todas las muestras de saliva y suero mostró que los resultados eran altamente significativos (P < .05).

Los modos más comunes de adquisición del VIH en el grupo de estudio fueron las relaciones sexuales sin protección (70%), seguidas de la transfusión de sangre (18%), la transmisión vertical (9%) y el uso de drogas intravenosas (3%). El 84% de las mujeres del estudio contrajo el VIH de sus maridos.

«La saliva puede utilizarse como alternativa a la sangre para la detección de anticuerpos contra el VIH, ya que la recogida de saliva es indolora, no invasiva, barata, sencilla y rápida», concluyen los autores. «Las pruebas de anticuerpos salivales pueden proporcionar un mejor acceso a los brotes epidémicos, a los niños, a las grandes poblaciones, a los grupos de riesgo de difícil acceso y, por lo tanto, pueden desempeñar un papel importante en la vigilancia y el control de las enfermedades altamente infecciosas».

Para futuros avances en la incorporación de la saliva como método de prueba alternativo para los anticuerpos del VIH, los autores señalan la importancia de futuros estudios en el área. Un área importante de estudio es la enzima inhibidora de la proteasa leucocitaria salival presente en la saliva, ya que impide que el VIH pueda replicarse.

También es necesario desarrollar pruebas ELISA más especializadas y precisas debido a la baja carga viral presente en la saliva humana y para evitar futuros resultados inexactos de las pruebas.

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