Este artículo apareció originalmente en VICE Canadá.

A veces estás realmente harto. La semana de trabajo ha sido una mierda, tu viaje al trabajo te ha tenido apretado contra los cuerpos de extraños, y ahora, te preguntas qué decisiones en tu vida te han llevado a esta miserable existencia. Una cosa es segura: necesitas un tiempo a solas.

Y entonces, justo a tiempo, alguien con quien no quieres hablar quiere hablar contigo. O invitarte «a tomar algo». Se cuelan en tus DMs una y otra vez, o coquetean contigo… quizás todas estas cosas. Clásico.

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Seguro, la interacción humana está muy bien, ¿verdad? Pero, también lo es volver a la soledad de tu casa para ver Netflix y vapear. Estoy seguro de que algunas mariposas sociales están leyendo esto y se preguntan quién podría estar tan amargado con la humanidad como para necesitar consejos sobre planes de escape. Esto probablemente no es para ti.

Invéntate una excusa elaborada.
Pero, por favor, no te inventes una que tenga que ver con que un ser querido se ha lesionado gravemente en un accidente o tiene cáncer. Esa mierda ni siquiera es creíble y definitivamente te dará mal karma-si es que eso es algo que realmente existe.

Silencio.
Como alguien que recientemente comenzó a usar el botón de «silencio» en las conversaciones de iMessage, puedo decirte que esta es una herramienta de escape que todos deberían tener en su bolsillo. Un despistado molesto puede enviarte todos los mensajes que quiera, pero ninguno de ellos hará que aparezca en tu pantalla una notificación que te provoque ansiedad. Cuando estés preparado, puedes mirar tu «conversación de mensajes de texto», que en realidad puede parecer una persona hablando consigo misma, y considerar si es necesario bloquearla.

Ponte a hacer una llamada de teléfono falsa.
Un empleado anónimo de VICE habló de una de sus tácticas de escape:
«Hago esta cosa en la que hago llamadas de teléfono falsas sólo para salir de un garito sin hablar con la gente… porque quiero salir del garito sin hablar con la gente. Es así de simple. No quiero que me digan «hasta luego» o que me den un puñetazo accidentalmente. Simplemente he terminado. Si es mitad del día, y estoy abrazando mi teléfono a la oreja mientras me dirijo a la puerta, no voy a volver.»

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Mira tu teléfono, finge que tienes un mensaje importante, y aléjate de la situación.
Como la última, con un giro. A veces mirar el teléfono con una expresión de alarma en la cara y salir corriendo al baño es más creíble que estar en una llamada telefónica en el año 2018.

Fantasma.
Una forma siempre vigente de evitar a la gente. Sólo ten en cuenta que ahora algunos llaman a este comportamiento «abusivo». Pero, si alguien te está haciendo sentir realmente incómodo y no respeta tus límites, además de que crees que actuará de forma irracional o incluso violenta si le dices lo que realmente sientes, a veces simplemente tienes que hacerlo. Si ese es el caso, no pierdas el tiempo sintiéndote mal por ello. Cuidar de ti mismo no es algo de lo que debas avergonzarte.

«El trabajo está muy ocupado ahora mismo, ¡lo siento!»
Esto ni siquiera es una excusa porque probablemente sea la verdad si eres un adulto que trabaja.

Sólo di «no». No es necesario que aceptes todos los compromisos sociales ni que entretengas a todas las personas que coquetean contigo. A veces, negarse rotundamente es lo que hay que hacer. Desgraciadamente, algunas personas son muy persistentes, especialmente las que realmente quieren tener sexo o salir contigo y no entienden las indirectas. Si alguien no puede aceptar un no por respuesta, es una seria señal de alarma. Probablemente no quieras a esa persona en tu vida, ni siquiera en la periferia. Abortar.

Reprogramar.
Tal vez no te sientas bien hoy. Pero si tienes que reprogramar a alguien una y otra vez, es una señal de que probablemente no te interesa tenerlo cerca. Es mejor ser directo si puedes serlo y hacerles saber que no estás interesado en pasar tiempo con ellos si se llega al punto de reprogramar en serie.

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Bloquéalos en todas las redes sociales (y su número de teléfono) y actúa como si no supieras quiénes son cuando te los encuentres.
Esta opción es para cuando el botón de silencio y tu sospechosa falta de respuestas de alguna manera no envían una señal clara. Lo que estás viviendo puede incluso considerarse acoso. Un consejo ya que estamos: Si alguien ignora un mensaje tras otro tuyo, lo más probable es que sea porque no está interesado en hablar contigo y no porque su teléfono esté estropeado.

Cambia de vida para no tener que interactuar con ellos.
Parece extremo, pero si alguien está invadiendo repetidamente tu espacio personal y tu tiempo, quizá sea el momento de buscar otras opciones. ¿Necesitas cambiar de trabajo? ¿Círculos sociales? ¿Mudarte? ¿Tomar un descanso de las redes sociales?

Tal vez sólo decirles la verdad acerca de cómo te sientes.
La honestidad realmente puede ser la mejor política a veces. Pero si esta persona no puede aceptar el rechazo (como esa persona que simplemente no entiende que no tienes química de amigo) siéntete libre de optar por un plan de escape más siniestro. Cuando alguien no respeta tu verdad y siempre prioriza sus sentimientos, no tiene cabida en tu vida.

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