Una nutrición adecuada no sólo es buena para la salud en general; también es buena para las articulaciones. La mayoría de las personas que sufren de artritis no se dan cuenta de que lo que se come puede aumentar o disminuir los síntomas negativos causados por la artritis. Aunque no padezca la enfermedad, es conveniente saber qué alimentos favorecen el funcionamiento y la salud de las articulaciones y cuáles no.
Los 5 peores alimentos para la artritis
Todos los siguientes alimentos tienen una dolencia en común: la inflamación. Si ya está sufriendo los efectos debilitantes de la artritis, sus articulaciones ya están suficientemente inflamadas. ¿Por qué echar más leña al fuego?
1. El azúcar. Los estudios demuestran que cuanto más azúcar añadido consumes, más ácido úrico crea tu cuerpo. El ácido úrico provoca inflamación e incluso resistencia a la insulina. Los principales culpables, el azúcar refinado y el jarabe de maíz de alta fructosa, se encuentran en los caramelos, el pan blanco, los refrescos, los cereales para el desayuno, la salsa de barbacoa, el ketchup, algunos yogures, los helados, las galletas y muchos más alimentos ricos en azúcar y bajos en nutrientes.
Recomendación dietética: Para las mujeres, 6 cucharaditas o 25 gramos al día. Para los hombres, 9 cucharaditas o 38 gramos al día.*
2. Grasas trans. Se ha demostrado que estas grasas causan inflamación sistémica. También conocida como inflamación crónica, es un factor de dolor musculoesquelético. ¿La mejor manera de combatir este tipo de inflamación? Evitar los alimentos con «aceites hidrogenados» o «aceites parcialmente hidrogenados» en su lista de ingredientes. Entre ellos se encuentran los alimentos fritos, la margarina, las galletas procesadas, los donuts, las galletas saladas y las mezclas para pasteles; básicamente, hay que evaluar todos los alimentos enlatados o en caja.
Recomendación dietética: Limitar a menos del 1% de las calorías diarias por día. Para una dieta de 2.000 calorías al día, el 1% equivale a 20 calorías.*
3. Sal. El consumo de sal en exceso hace que aumente el volumen de la sangre, porque el sodio absorbe agua. Esto hace que los vasos sanguíneos se expandan, lo que aumenta la presión en las zonas circundantes, incluidas las articulaciones.
Recomendación dietética: No más de 2.300 mg al día, es decir, aproximadamente una cucharadita. Cantidad ideal: 1.500 mg al día.*
4. Carnes procesadas. Son carnes que han sido modificadas respecto a su estado original mediante la salazón, el curado, la fermentación y/o el ahumado para potenciar el sabor y prolongar la vida útil. Los perritos calientes, el jamón, el tocino, las salchichas, la carne en conserva, la cecina, la mortadela, algunos embutidos y la carne enlatada son procesados. Estos alimentos contienen productos finales de glicación (AGE), que se forman durante el procesamiento y causan inflamación.
Recomendación dietética: Eliminar la carne procesada de la dieta si es posible.
5. Cereales refinados. El pan blanco, los donuts, la pasta, las galletas y la pizza son ejemplos clásicos de granos refinados, también conocidos como «carbohidratos malos». Los granos refinados aumentan el nivel de glucosa en la sangre y aumentan la inflamación en varias partes del cuerpo.
Recomendación dietética: Los granos refinados deben consumirse con moderación. Los granos no refinados deben constituir entre el 45 y el 64 por ciento de las calorías diarias.**
Una buena nutrición puede ayudar
Para el dolor crónico de rodilla, no hay una solución rápida. Pero, hay cosas que puede hacer para aliviar algunas molestias e incluso ralentizar el progreso de ciertas enfermedades incapacitantes, que incluyen la artritis. La buena nutrición es una de las principales. Combine el consumo de alimentos buenos para las articulaciones, un buen programa de ejercicios y un suplemento de calidad para las articulaciones y estará en camino de sentirse mejor que nunca.
*La Asociación Americana del Corazón