Un nuevo estudio, publicado en Science, muestra que los primeros pobladores de las regiones árticas de Norteamérica y Groenlandia fueron un grupo que se trasladó a la zona desde Siberia alrededor del año 3.000 a.C. Vivieron aislados durante casi 4.000 años, antes de desaparecer.
Investigaciones anteriores han indicado que hubo tres oleadas de migración desde Asia al Nuevo Mundo; este nuevo estudio añade una cuarta. Se cree que los primeros humanos cruzaron el estrecho de Bering hace más de 15.000 años; esta nueva oleada de paleoesquimales, que llevó a los primeros pobladores a extenderse por el norte de Alaska, Canadá y Groenlandia, habría llegado después de las dos primeras oleadas, pero antes de que los neoesquimales o thule hicieran el viaje entre continentes.
Arqueológicamente, los pueblos que vivieron en el Ártico norteamericano entre aproximadamente el 2.500 a.C. y el 1.000 d.C. se conocen como las culturas Dorset y Pre-Dorset. (Se las clasifica en función de las herramientas y obras de arte que dejaron). Este nuevo estudio demuestra que este grupo no sólo tenía tradiciones y cultura diferentes de las poblaciones posteriores de la zona, sino que también era genéticamente distinto a ellas.
Esa falta de mezcla genética fue una gran sorpresa, dijo Eske Willerslev, biólogo evolutivo y coautor del estudio, en una conferencia de prensa. «En otros estudios, cuando vemos que las personas se encuentran, puede que se peleen entre sí, pero normalmente también tienen sexo entre ellos. Y ese no parece haber sido realmente el caso aquí, y deben haber estado coexistiendo durante miles de años», dijo Willerslev.
Los paleoesquimales vivían en pequeñas aldeas (poblaciones de apenas 20 a 30 personas) dispersas por el Ártico, dijo Bill Fitzhugh, otro coautor y arqueólogo del Museo Nacional de Historia Natural. Para que estas sociedades sobrevivieran durante 4.000 años aisladas, sugirió, debían ser muy tradicionales y estar muy vinculadas a la tierra y a los recursos que utilizaban para sobrevivir. «Casi se podría decir, en tono de broma y de manera muy informal, que los dorsets eran los hobbits del Ártico oriental, un pueblo muy extraño y muy conservador que apenas estamos conociendo un poco», afirma Fitzhugh.
Después de sobrevivir aislados durante casi 4.000 años, los paleoesquimales/dorsets desaparecieron alrededor del año 1.300 d.C., en el espacio de apenas 100 a 150 años. Los investigadores aún no saben cómo desaparecieron exactamente, si fue la violencia, las enfermedades o algún factor desconocido lo que los eliminó. Fueron sustituidos por el pueblo Thule, que había desarrollado barcos más grandes, armas más avanzadas y la capacidad de cazar ballenas. Las pruebas genéticas recogidas en este estudio indican que los pueblos inuit modernos descienden de los Thule y no de los grupos paleoesquimales.