Extracción de las muelas del juicio
Extracción de las muelas del juicio
Si no tiene suficiente espacio en la boca para que las muelas del juicio erupcionen completamente, pueden producirse varios problemas. Las muelas del juicio impactadas deben extraerse antes de que su estructura radicular esté completamente desarrollada. En algunos pacientes, la extracción puede realizarse a partir de los 12 ó 13 años. En otros, puede que no sea hasta los veinte años. Los problemas suelen aparecer con mayor frecuencia a partir de los 30 años. Algunos de los posibles problemas relacionados con la no extracción de las muelas del juicio son:
Infección:
El problema clínico más frecuente que vemos con las muelas del juicio es la pericoronitis, una infección localizada de las encías. Cuando han erupcionado parcialmente, la abertura en las encías alrededor de los dientes permite que las bacterias crezcan y acaben causando una infección. Sin espacio suficiente para la erupción total, el tejido gingival que rodea la muela del juicio puede irritarse e infectarse, lo que provoca dolor recurrente, hinchazón y problemas para masticar y/o tragar.
Formación de quistes:
Las enfermedades no infecciosas también pueden surgir en asociación con una extracción de muelas del juicio impactadas. Los quistes son «globos» llenos de líquido dentro del hueso de la mandíbula que se desarrollan como resultado de los dientes impactados. Se expanden lentamente, destruyendo el hueso de la mandíbula adyacente y ocasionalmente los dientes. Pueden ser muy difíciles de tratar si no se extraen las muelas del juicio en la adolescencia. Aunque es raro, los tumores pueden estar asociados con el retraso en la extracción de las muelas del juicio.
Posible apiñamiento:
Las muelas del juicio impactadas pueden contribuir al apiñamiento de sus dientes. Esto es más notorio en los dientes frontales, principalmente en los dientes frontales inferiores. Esto es más comúnmente visto después de que un paciente ha tenido los frenos. Sin embargo, hay una serie de factores que causan el apiñamiento de los dientes después de los frenos o en la edad adulta temprana. Las muelas del juicio retenidas e impactadas pueden ser un factor que contribuye. A menos que tenga un problema activo cuando acuda al cirujano oral, la razón de la extracción es principalmente para evitar daños a largo plazo en los dientes, las encías y el hueso de la mandíbula.
Daños en los dientes adyacentes:
Si no hay espacio suficiente para limpiar alrededor de la muela del juicio, el diente situado directamente delante (el segundo molar) puede verse afectado negativamente, lo que provocará enfermedades en las encías, pérdida de hueso alrededor del diente y/o caries.
Para los pacientes de más edad, la curación puede ser más lenta y la posibilidad de infección puede aumentar. Si sus muelas del juicio impactadas no se extraen en la adolescencia o a principios de los veinte años y están completamente impactadas en el hueso, puede ser aconsejable esperar hasta que se desarrolle un problema localizado (como la formación de quistes o la enfermedad de las encías localizada y la pérdida de hueso). En general, se curará más rápido y con menos complicaciones si se trata en la adolescencia o a principios de los veinte años.
En la mayoría de los casos, la extracción de las muelas se realiza bajo sedación intravenosa o anestesia general. Estas opciones, así como los posibles riesgos quirúrgicos, se discutirán con usted antes de realizar el procedimiento. La encía se sutura una vez que se extraen los dientes y se coloca una gasa en la boca para ayudar a controlar el sangrado.
Nuestro personal de la oficina tiene la formación, la licencia y la experiencia para proporcionar los diversos tipos de anestesia. Estos servicios se prestan en un entorno de seguridad óptima, utilizando un moderno equipo de monitorización y un personal bien formado y con experiencia. El equipo de atención quirúrgica, las instalaciones del consultorio y los médicos son inspeccionados en nombre de la Sociedad Americana de Cirujanos Orales y Maxilofaciales.
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