En Norteamérica, la obesidad es la enfermedad prevenible más común en los perros. Aproximadamente el 25-30% de la población canina general es obesa, y el 40-45% de los perros de 5 a 11 años tienen un peso superior al normal.
¿Qué es la obesidad?
La obesidad es una acumulación de exceso de grasa corporal. El peso corporal extra y la grasa corporal extra tienden a ir de la mano, por lo que la mayoría de los perros con sobrepeso tendrán un exceso de grasa corporal.
El peso corporal es fácil de medir cuando se evalúa si un perro tiene sobrepeso u obesidad – más fácil que tratar de medir la grasa corporal. Utilizando el peso corporal como guía, se considera que los perros tienen sobrepeso cuando pesan un 10-20% por encima de su peso corporal ideal. Se considera que son obesos cuando pesan un 20% o más por encima de su peso corporal ideal.
¿Cuáles son los riesgos de la obesidad?
La obesidad acorta la vida de un perro y le hace más propenso a desarrollar enfermedades. Siempre se ha aceptado que los perros pesados tienen una vida más corta que los perros delgados, normalmente entre 6 y 12 meses. Pero un amplio estudio sobre la vida de los Labradores Retriever ha descubierto que incluso un sobrepeso moderado puede reducir la esperanza de vida de un perro en casi dos años en comparación con sus congéneres más delgados. Se trata de una estadística aleccionadora.
Antes se consideraba que la grasa era un tejido relativamente inactivo, que simplemente almacenaba el exceso de calorías energéticas y aumentaba la masa corporal. Sin embargo, las pruebas científicas revelan ahora que el tejido adiposo es biológicamente activo. Segrega hormonas inflamatorias y crea un estrés oxidativo en los tejidos del cuerpo, lo que contribuye a muchas enfermedades. Pensar en la obesidad como una condición inflamatoria crónica de bajo nivel es un nuevo enfoque.
«El exceso de grasa impacta negativamente en la salud y la longevidad del perro».
Los perros obesos desarrollan un mayor riesgo de:
- muchos tipos de cáncer, diabetes mellitus, enfermedades cardíacas e hipertensión
- osteoartritis y una degeneración más rápida de las articulaciones afectadas
- piedras en la vejiga urinaria
- complicaciones anestésicas al ser menos tolerantes al calor
Por otro lado, la obesidad puede ser un indicador de enfermedad, como el hipotiroidismo (una glándula tiroidea poco activa) o la enfermedad de Cushing (glándulas suprarrenales hiperactivas).
¿Cómo puedo saber si mi perro es obeso?
El primer paso para tratar con un perro con sobrepeso u obesidad es reconocer y admitir que hay un problema. Desgraciadamente, estamos inundados de imágenes en los medios de comunicación de perros con un peso excesivo, lo que hace que sea un reto entender cómo es lo normal. Su veterinario y el equipo de atención sanitaria veterinaria pueden ayudarle a realizar una evaluación.
La cobertura de las costillas no sólo es una medida importante para ayudarle a identificar si su perro tiene sobrepeso, sino que también es fácil de realizar en casa, por su cuenta. Si mantiene su mano con la palma hacia abajo y siente sus nudillos con las caras planas de los dedos de la mano opuesta, así es como deben sentirse las costillas de su perro justo detrás de los omóplatos. También es un buen método para medir el progreso de la pérdida de peso entre los pesajes formales.
Su equipo de atención veterinaria le proporcionará un peso corporal ideal estimado para utilizarlo como objetivo, pero es importante que también realicen evaluaciones regulares de la condición corporal para asegurarse de que se está progresando hacia un peso y una condición corporal normales. La mayoría de los consultorios veterinarios utilizan un sistema de puntuación de la condición corporal en una escala de 1 a 5 (3 es normal) o de 1 a 9 (5 es normal).
¿Cómo puedo ajustar las comidas de mi perro para ayudarle a perder peso?
Una vez que haya identificado que su perro tiene sobrepeso u obesidad, es importante ajustar la alimentación específicamente para la pérdida de peso, utilizando un producto nutricional específico, una porción específica y una frecuencia de comidas específica. Existen productos nutricionales formulados científicamente para ayudar a una reducción de peso saludable y segura en los perros, como Hills® Prescription Diet® Metabolic, Royal Canin® Satiety Support Weight Management y Purina Overweight Management®. No es conveniente limitarse a reducir el volumen de su comida actual. Esto causará desnutrición con el tiempo.
Es apropiado e importante alimentar con un producto nutricional que tenga una menor densidad calórica total, pero que mantenga un equilibrio de nutrientes adecuado. Su equipo de atención médica veterinaria puede ayudarle a determinar qué productos nutricionales son los mejores para su perro.
Una vez que se haya seleccionado el nuevo alimento y se hayan determinado las nuevas porciones, es fundamental que sea coherente con la alimentación -porciones y frecuencia de las comidas- y que resista la tentación de proporcionar aperitivos inadecuados. Las golosinas no deben suponer más del 10% de la ingesta diaria de calorías del perro. Las judías verdes frescas o congeladas, el brócoli y la coliflor, así como las palomitas de maíz infladas, son excelentes tentempiés si su veterinario lo aprueba.
«No es apropiado reducir simplemente el
volumen de su comida actual. Esto causará desnutrición con el tiempo».
Los pesajes regulares, cada 2-3 semanas (o como mínimo una vez al mes), son un componente importante para el éxito de la pérdida de peso canina y mantiene a todos responsables – Weight Watchers® ha estado utilizando este principio durante décadas. Es importante verificar la pérdida de peso, para asegurarse de que la pérdida de peso no es demasiado rápida ni excesiva, y para determinar cuándo se ha perdido suficiente peso.
Para obtener más consejos sobre cómo reducir el peso de su perro, consulte el folleto «Creación de un plan de reducción de peso para perros» y «Cómo pasear a su perro para que pierda peso».
¿Qué ocurre cuando alcanzamos nuestro objetivo de pérdida de peso?
Una vez que se ha alcanzado un peso y una condición corporal ideales, es importante mantener ese peso. Una vez más, su equipo de atención médica veterinaria puede ayudarle a encontrar un alimento y una ración adecuados para el mantenimiento del peso.
El control de las raciones es fundamental en esta fase para evitar la recuperación del peso. Después de tanto esfuerzo, una recaída en la obesidad sería decepcionante. La pérdida y el aumento de peso yo-yo no es más saludable para los perros que para los humanos. Los beneficios de normalizar el peso y la condición corporal hacen que el esfuerzo merezca la pena.