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¿Cuándo cayó Satanás del cielo? ¿Cuál fue el motivo?
La caída de Satanás y de la humanidad
El orgullo fue la causa principal tanto de la caída de Satanás (Lucifer en su momento) como de la humanidad. De hecho, el orgullo parece estar en el centro de todo pecado. Después de la caída, de la que leeremos en el siguiente párrafo, Satanás probablemente estaba celoso de que a la humanidad se le diera el dominio sobre la tierra, ya que Génesis 1:26 dice «que tengan dominio sobre los peces del mar y sobre las aves del cielo y sobre el ganado y sobre toda la tierra y sobre todo lo que se arrastra sobre la tierra.» Satanás tramó un plan. Engañaría a Eva y la haría desobedecer a Dios tomando para comer del árbol de la ciencia del bien y del mal y Adán haría lo mismo. Después de esto, «Y dijo Jehová Dios: He aquí que el hombre se ha hecho como uno de nosotros, para conocer el bien y el mal; y ahora, para que no alargue su mano y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre» (Gn 3:22) y por eso «Jehová Dios lo desterró del Jardín del Edén para que trabajara la tierra de donde había sido tomado» (Gn 3:23). No sólo fueron desterrados del Jardín del Edén, sino que ahora recibirían su salario y eso era la muerte (Rom 6:23) y finalmente morirían porque el alma que peca morirá (Ez 18:20). Habían perdido su oportunidad de vida eterna y su única esperanza sería que se arrepintieran, pero no hay evidencia de que lo hicieran. Simplemente no sabemos con certeza si alguna vez lo hicieron.
La caída de Satanás
Isaías nos da un buen vistazo a la causa de la caída de Lucifer del cielo en Isaías 14:12 «¡Cómo has caído del cielo, oh estrella de la mañana, hijo de la aurora! Has sido cortado a la tierra, tú que has debilitado a las naciones». La palabra hebrea para «estrella» es «Helel» o «Hylel» y significa «el que brilla», por lo que Lucifer debe haber sido un ángel glorioso lleno de luz en un momento dado, pero luego sucedió algo drástico: «Pero tú dijiste en tu corazón: «Subiré al cielo; elevaré mi trono por encima de las estrellas de Dios, y me sentaré en el monte de la asamblea, en las profundidades del norte» (Isaías 14:13). Aquí leemos que Lucifer estaba lleno de sí mismo, lleno de orgullo, y quería «subir al cielo» y elevar su trono sobre las estrellas (o ángeles) de Dios y quería «sentarse en el monte de la asamblea en las profundidades del norte», lo que significa que quería sentarse en el trono de Dios pero en lugar de Dios. Esta caida debe haber sucedido aparentemente poco despues de la creacion de la tierra ya que tuvo que haber tenido una tierra para ser arrojado tambien.
Lucifer no estaba satisfecho con su estado…el queria mas por lo cual fue escrito «Subire sobre las alturas de las nubes; me hare como el Altísimo» (Isaias 14:14). En otras palabras, Lucifer (o Satanás) quería «ascender por encima de las alturas de las nubes» de las cuales las nubes representan la gloria Shekinah de Dios y él quería esa gloria. Aun mas, el deseaba en su corazon orgulloso diciendo «me hago como el Dios mas alto» y queria ser Dios porque deseaba la adoracion. Todavía desea eso hoy pero las malas noticias para él son que «será arrojado al Seol, a las profundidades de la fosa» (Isaías 14:15) y la consumación final de eso se describe en Apocalipsis 20:10 «Y el diablo que los engañó fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde también están la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.»
Orgullo antes de la caída
Satanás no fue el único en caer y aún habrá más en el futuro. Eso es porque cualquiera que esté lleno de orgullo está en guerra con Dios (Santiago 4:6) porque «La soberbia abate a la persona, pero los humildes de espíritu ganan la honra» (Prov 29:23) que es la razón por la que Santiago escribió «Humillaos ante el Señor, y él os levantará» (Santiago 4:10). Lo contrario también es cierto: si te elevas, Él te humillará. O nos humillamos ante Dios o Él lo hará por nosotros y ¿adivina cuál es más doloroso? Esto se debe a que «Dios se opone a los soberbios, pero muestra su favor a los humildes» (1 Pe 5:5). A los que se niegan a humillarse voluntariamente, Dios les advierte: «Antes del quebrantamiento es la soberbia, y antes de la caída la altivez de espíritu» (Prov. 16:18). La palabra «soberbio» significa alzado o mirar a los demás desde una posición elevada y esa posición sólo la tiene Dios. Ser altivo es estar lleno de orgullo y Dios no tolerará tal actitud, tal como no toleró el orgullo de Lucifer.
El egocéntrico Lucifer
Ezequiel escribió sobre el estado anterior de Lucifer al escribir «Tenías el sello de la perfección, Lleno de sabiduría y perfecto en belleza» (Ezk 28:11). En un tiempo fue «el querubín ungido que cubre, y yo te puse allí. Estuviste en el monte santo de Dios; anduviste en medio de las piedras de fuego» (Ez 28:14) y «Fuiste irreprochable en tus caminos desde el día en que fuiste creado hasta que se halló en ti la injusticia» (Ez 28:15). Dios describe la razón de la caída de Lucifer (o Satanás) «Tu corazón se enalteció a causa de tu belleza; corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor. Te arrojé a la tierra» (Ez 28:17). Estaba enamorado… de sí mismo y por eso su «corazón se enalteció» a causa del orgullo por su belleza, sabiduría y esplendor. Hay muchos en el mundo sin salvación hoy en día así y su destino será el mismo que el de Satanás del que se habla en Apocalipsis 20:10-15.
Conclusión
Por qué más de nosotros, incluido yo mismo, no nos humillamos es un misterio para mí. Si comprendiéramos plenamente la impresionante, majestuosa, gloria de Dios, todos nos postraríamos ante Él y nos humillaríamos. Nadie puede ser verdaderamente salvado hasta que se humille ante Dios, hasta que se arrepienta de sus pecados, lo que significa que se aleje de ellos y los abandone y entonces se dirija a su única esperanza de ser salvado y eso es Jesucristo. Él será su Señor y Salvador o será su Juez. Esa decisión depende estrictamente de usted.
Más sobre Lucifer (Satanás) aquí: ¿Existe realmente un ser llamado Satanás?