Aunque hay muchas variaciones, un hogtie básico implica unir las muñecas y los tobillos detrás de la espalda. Esto también puede hacerse con las piernas separadas atando los tobillos por separado (lo que permite más fácilmente el contacto sexual).
Cuanto más cerca estén las muñecas y los tobillos, más agotadora será la posición. Una vez atada, la persona atada puede colocarse de frente o de lado, exponiendo diferentes zonas de su cuerpo para el juego.
Nota: Siempre que haya compresión en el pecho de una persona, la asfixia posicional es un riesgo. Asegúrese de que la persona atada pueda respirar con facilidad en todo momento.
Cuando se utilizan posiciones de bondage como el hogtie, la seguridad debe ser una preocupación primordial. Atar a un sumiso en esta posición con las manos demasiado atrás, por ejemplo, puede restringir la respiración. Esto es especialmente cierto si la cabeza del sumiso está atada hacia atrás. También es importante asegurarse de que no se corta la circulación en las muñecas y los tobillos de la sumisa, ya que esto puede provocar daños en los tejidos e incluso la pérdida de las extremidades. Una palabra o señal de seguridad debe usarse y respetarse en todo momento durante el juego bondage; si un sumiso dice una palabra de seguridad o da una señal, toda la actividad debe cesar y el sumiso debe ser liberado.
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