Las «Reglas de Oro» evocan pensamientos de leyes divinas que no deben ser rotas por el hombre o la bestia; reglas ordenadas y escritas en granito para toda la eternidad. Reglas que, si se rompen, pueden destruir la relación del hombre con la naturaleza y causar estragos en el universo. Reglas seguidas por todos los hombres santos o visionarios.
Los estilos de las artes marciales chinas tienen reglas básicas que pocos estudiantes ven. Sus pensamientos se centran en la técnica básica o el sabor (del sur o del norte) de un estilo. Rara vez ven las similitudes pero se apresuran a señalar las diferencias. Estas similitudes representan la base de todas las artes marciales chinas, sin estas vigas de apoyo, el estilo se vuelve ineficaz. Si los estudiantes comprenden estas reglas, su comprensión básica y su nivel de habilidad mejoran. Se dan cuenta de sus técnicas y pueden realizar mejoras y actualizaciones a medida que progresan. También pueden detectar el Kung Fu que es menos que satisfactorio; algo que pocos estudiantes ven.
En lugar de ser asombrados por maniobras de fantasía o habladores hábiles, pueden ver y hacer las preguntas apropiadas para explorar la verdad o la mentira de un sistema. Estas mismas reglas se aplican tanto si haces Tai Chi como Kung Fu.
Regla # 1 – Dar un paso antes de golpear
Dar un paso y golpear o bloquear es la regla de oro número uno del Kung Fu que es la más fácil de hacer y la más fácil de entender, pero que muchos estudiantes no hacen. Como está implícito en la descripción, siempre hay que dar un paso primero en una excelente postura estable y luego ejecutar la técnica. Las posturas son la forma de generar potencia y mantener el equilibrio. Por ejemplo, si fueras a empujar un coche, lo primero que harías es ponerte en una postura profunda y colocar tus manos en el coche y mientras empujas hacia adelante con tus manos mantener tu raíz en el suelo.
Para el Tai Chi, tienes que asegurarte de quitar el peso de un pie antes de moverlo, y colocarlo plano sin peso antes de poner el peso sobre él.
Regla nº 2 – Potencia
Potencia en Kung Fu significa fuerza explosiva al final de una técnica de golpeo o bloqueo. Este simple concepto a veces se malinterpreta como fuerza. Los artistas marciales levantan entonces pesas para aumentar su fuerza y, según creen, aumentar su potencia. La potencia es la concentración de la energía del cuerpo en un punto específico, cuanto más pequeño sea el punto… más potencia. Por ejemplo, el sol es una fuerza dominante pero nos hace poco daño. Sin embargo, si enfocamos la energía del sol a través de una lupa a un punto pequeño, podemos crear calor y fuego extremos. La potencia en la técnica del Kung Fu requiere velocidad, flexibilidad, concentración, precisión milimétrica y cooperación de todo el cuerpo.
La potencia es un producto del tiempo que se tarda en transmitir la energía, no de la fuerza o la masa de un objeto. Los músculos requieren elasticidad para realizar la tarea. La potencia proviene de la mayor longitud o flexibilidad de los músculos. Si tengo una goma elástica nueva de tamaño medio con una excelente elasticidad, y tiro de un extremo y lo suelto para que se rompa la goma, genera mucha potencia. Pero supongamos que tengo otra goma, gruesa y poco flexible. Cuando tire de la goma elástica, no será tan lejos, y mi chasquido hacia delante lleva menos potencia.
Cuando un practicante de Kung Fu ejecuta una técnica, se produce la transmisión de energía. La transferencia de energía ocurre en tres formas: transmisión circular, transmisión directa, o transmisión angular.
Regla # 3 – Cintura
La cintura es el maestro del cuerpo. Controla la coordinación entre las mitades superior e inferior del cuerpo. Sin un adecuado control y cooperación de la cintura, ningún practicante puede desarrollar una buena potencia, equilibrio o velocidad. La potencia comienza en las plantas de los pies, viaja a través de las piernas y sigue la dirección de la cintura. Si la cintura dirige mal la energía, ésta nunca llegará a los brazos y se expresará a través de las manos.
Hay dos tipos de rotación de la cintura: positiva o negativa. La rotación positiva hace girar la cadera en la dirección del golpe, mientras que la rotación negativa hace girar la cadera en la dirección opuesta al golpe. Ambas cambian la dirección de cómo fluye la potencia a través del cuerpo y hacia las manos.