Reconociendo la Adicción a la Nicotina
Debido al uso generalizado de los cigarrillos, el tabaco de mascar y el rapé, puede ser difícil detectar una adicción real a la nicotina.
En 2011, el 26,5 por ciento de la población estadounidense mayor de 12 años dijo haber consumido un producto de tabaco al menos una vez en el mes anterior a ser entrevistado.
Muchas de estas personas tienen una adicción a la nicotina y lo niegan. Pueden ser fumadores sociales que sólo consumen tabaco cuando salen con sus amigos, o pueden ser fumadores que creen que pueden dejarlo cuando estén preparados. Reconocer los signos de una adicción a la nicotina es importante para superar la negación y superar la adicción.
Señales comunes de adicción
- Requieren más tabaco para sentir satisfacción
- Experimentan síntomas de abstinencia, como irritabilidad
- Consumir tabaco en mayor cantidad de la prevista
- Tener el deseo de dejar o disminuir el consumo pero ser incapaz de hacerlo
- Experimentar antojos e intensos impulsos de consumir tabaco
- Continuar el consumo de tabaco a pesar de ser consciente de las consecuencias y los riesgos para la salud
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Síntomas físicos
Los síntomas físicos de la adicción a la nicotina son causados por la abstinencia. El síndrome de abstinencia de la nicotina se produce porque el cerebro adicto ya no puede producir naturalmente niveles adecuados de ciertas sustancias químicas, como la dopamina. Estos síntomas pueden aparecer en tan sólo dos horas después de dejar de consumir tabaco y suelen ser los peores 2-3 días después de dejarlo.
Los síntomas de abstinencia de la nicotina incluyen:
- Dificultad para concentrarse
- Ansiedad y ataques de pánico
- Depresión
- Dificultad para dormir
- Irritabilidad y frustración
- Aumento del apetito y del peso
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Síntomas psicológicos
Una vez que el cerebro de una persona está recableado para la adicción al tabaco, los escenarios que se asocian al consumo de tabaco (desencadenantes psicológicos) pueden causar ansias de fumar.
Los desencadenantes más comunes para las personas con adicción a la nicotina son la conducción, la bebida, la música, el estrés, el trabajo y después de las comidas.
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Los riesgos del tabaco
La mayoría de las personas, incluidas las que consumen tabaco, son conscientes de los graves riesgos para la salud asociados al consumo de tabaco. Cada año se producen más muertes relacionadas con el tabaco que todas las muertes por drogas ilícitas, alcohol, accidentes de tráfico y asesinatos juntos. Muchas personas con adicciones desean dejar de fumar porque conocen los riesgos para la salud. Por lo tanto, no es de extrañar que alrededor del 70% de los consumidores de tabaco tengan el deseo de dejarlo.
Algunos de los riesgos para la salud asociados al consumo de tabaco son:
- Infertilidad
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- Asma
- Cáncer de pulmón
- Enfermedad cardíaca
- Cáncer de boca y de esófago
- Infarto
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Tabaco y cáncer
Estos son sólo algunos de los riesgos más comunes para la salud asociados al consumo de tabaco. Las sustancias químicas carcinógenas del tabaco provocan cambios genéticos, lo que hace que los consumidores de tabaco corran un mayor riesgo de padecer muchos tipos de cáncer.
Los carcinógenos son sustancias químicas que provocan cáncer y que alteran el ADN de una persona. Los carcinógenos del tabaco pueden causar un crecimiento celular anormal que puede convertirse en tumores cancerosos. El tabaquismo provoca la muerte por cáncer de pulmón en aproximadamente el 90% de los hombres y el 80% de las mujeres.