La clave para lograr el alivio del síndrome del intestino irritable (SII) es comprender que el SII es un trastorno complejo de la motilidad (motor) y sensorial. Puede tener dimensiones físicas y relacionadas con el estrés.
Una fuerte asociación entre un paciente informado y un proveedor de atención médica empático y bien informado puede producir una mejora significativa y el control de los síntomas para las personas con SII.
La primera línea de tratamiento para el SII incluye medidas generales como:
- establecer una relación eficaz entre el paciente y el médico,
- obtener educación sobre el SII y
- implementar cambios en el estilo de vida, que pueden estar asociados con los síntomas.
Cambios en el estilo de vida
El término «estilo de vida» se refiere a las cosas de su vida sobre las que tiene control. Por ejemplo, evalúe cualquier factor relacionado con la dieta o el estrés que pueda estar relacionado con los síntomas y coméntelo con el médico. Si ciertos alimentos desencadenan o empeoran los síntomas, redúzcalos o evítelos. Si el malestar o el dolor abdominal se producen después de comer, puede ser útil hacer comidas más pequeñas y más frecuentes.
El aumento del estrés puede provocar la aparición o el empeoramiento de los síntomas del SII y de los síntomas no intestinales asociados, como la fatiga o la baja energía. El descanso y el ejercicio adecuados pueden ayudar a reducir los niveles de estrés e influir positivamente en el SII.
Recuerde que tener SII es también un estrés y que aprender más sobre el trastorno, comunicarse eficazmente con su proveedor de atención médica y asumir un mayor papel en su autocuidado puede reducir ese estrés.
Medicamentos
Si los cambios en el estilo de vida no alivian por completo los síntomas del SII, hay una serie de medicamentos que pueden ser útiles:
- Los antiespasmódicos tienen un beneficio limitado para el tratamiento del SII pero pueden aliviar el dolor o las molestias abdominales en algunas personas, especialmente si los síntomas se producen poco después de comer.
- Los agentes antidiarreicos pueden ser eficaces para prevenir y aliviar los síntomas de la diarrea pero pueden no ser tan útiles para el dolor.
- Los laxantes pueden ayudar a tratar los síntomas del estreñimiento pero no necesariamente el dolor y deben utilizarse bajo la supervisión de un médico.
- Los medicamentos ansiolíticos pueden ser útiles para algunas personas con SII, en particular para las que padecen trastornos psicológicos.
Algunas personas con síntomas más leves-moderados sólo necesitarán medicamentos de vez en cuando. Por ejemplo, una persona con SII con predominio de diarrea puede tomar un antidiarreico o un antiespasmódico antes de salir de casa o de comer. Las personas con estreñimiento pueden beneficiarse de agentes voluminizadores (siempre que alivien y no empeoren los síntomas) o de laxantes en ocasiones.
También existen medicamentos eficaces que alivian el dolor y mejoran los cambios en el hábito intestinal. Es posible que deban tomarse a más largo plazo, como los agentes antidepresivos en dosis bajas o los medicamentos relativamente nuevos.
Una evaluación exhaustiva por parte de un médico es un paso importante para seleccionar el tratamiento más apropiado para sus circunstancias individuales. Independientemente de la terapia de tratamiento, hable siempre a fondo con su médico para que esté familiarizado con la terapia o el método, conozca las alternativas, comprenda los riesgos así como los beneficios y sepa qué hacer si se producen efectos secundarios o reaparecen los síntomas.
Las personas que no hayan respondido a los cambios en el estilo de vida y al uso cuidadoso de los medicamentos deben considerar la posibilidad de ser evaluadas por un médico especializado en trastornos gastrointestinales funcionales y de la motilidad o relacionados con el estrés. Los regímenes de medicación más complejos y los exámenes especializados pueden revelar condiciones específicas que pueden responder al tratamiento.
Probióticos y antibióticos
El tracto digestivo contiene trillones de bacterias. La investigación está demostrando actualmente que la composición de estas bacterias puede afectar a varios aspectos de la salud y la enfermedad. Hay algunas pruebas de que ciertos probióticos pueden ayudar a mejorar los síntomas del SII. Obtenga más información sobre los probióticos para el SII.
También existe la posibilidad de que algunas bacterias «malas» que residen en el intestino estén asociadas a los síntomas del SII en algunas personas. Ensayos clínicos recientes han demostrado que los antibióticos, que reducen o alteran las bacterias del intestino, pueden aliviar los síntomas del SII. Más información sobre los antibióticos para el SII.
Asesoramiento
Las terapias psicológicas y conductuales pueden estar indicadas y ser eficaces en ciertos individuos. Algunos ejemplos son:
- Terapia cognitivo-conductual (TCC), que permite al individuo recuperar habilidades personales así como técnicas mentales para manejar mejor los síntomas
- Hipnosis, para reducir las molestias dolorosas
- Entrenamiento en relajación para la relajación general del cuerpo
- Psicoterapia interpersonal para abordar las respuestas estresantes a las interacciones con los demás.
La terapia conductual o el asesoramiento especializado pueden ayudar a la autocomprensión y a la identificación de rasgos o problemas personales que pueden ser tratados. Hablar con un profesional permite discutir asuntos personales sin miedo a la recriminación o a la culpa (que es lo que puede ocurrir cuando se habla con la familia, los amigos o los colegas) y a menudo ayuda a desarrollar mutuamente un programa para el cambio.
Aprenda más sobre los tratamientos psicológicos utilizados para tratar el SII.
Medicinas complementarias y alternativas (MCA)
Se está evaluando la eficacia de las terapias de MCA, como la terapia de hierbas chinas, la acupuntura, la acupresión, la meditación de atención plena y el yoga en pacientes con SII. Los estudios de acupuntura han demostrado que una interacción positiva entre el proveedor y el paciente durante las sesiones de tratamiento de acupuntura se asocia con un efecto beneficioso en el SII.
Aprenda más sobre los tratamientos de CAM para el SII.
Adaptado de la Publicación #101 de IFFGD revisada y actualizada por Douglas A. Drossman, MD, Drossman Gastroenterology PLLC, Chapel Hill, NC.