Cómo afrontar las emociones
Descubrir que tiene una ETS puede despertar algunos sentimientos. Es posible que esté enfadado con la persona que le contagió o molesto por tener una enfermedad crónica.
Tenga en cuenta que la persona que le contagió el herpes genital probablemente no quiso ponerle en peligro. La mayoría de las personas con herpes genital no saben que lo tienen. Dado que el herpes puede no brotar durante mucho tiempo, también puede ser difícil averiguar exactamente cuándo lo has contraído. Y aunque hay muchas cosas que puedes hacer para tener relaciones sexuales más seguras, es posible que no evites por completo los riesgos de las ETS en todo momento. No sea demasiado duro consigo mismo, ni con nadie, al respecto.
Trate de concentrarse en lo que puede hacer ahora: Cuidar tu estado, contarle a tu pareja lo que te pasa, preguntarle a tu médico cómo evitar el contagio y buscar apoyo. Si te resulta difícil superar el sentimiento de traición o abatimiento por la situación, puedes hablar con un consejero que te ayude a manejar esas emociones. Unirse a un grupo de apoyo también es una opción. Pida ayuda a su médico para encontrar uno.