MCH significa hemoglobina corpuscular media, y es un cálculo de la cantidad media de hemoglobina contenida en cada uno de los glóbulos rojos de una persona. La hemoglobina es la sustancia que transporta el oxígeno desde los pulmones hasta las células a través del torrente sanguíneo. Los niveles anormalmente altos o bajos de HCM, determinados por un análisis de sangre, pueden ser un indicio de una serie de problemas en el organismo, que van desde deficiencias de nutrientes hasta enfermedades crónicas.
El análisis de sangre de HCM se realiza como componente de un análisis de sangre denominado hemograma completo (CBC), que evalúa la composición de la sangre, comprobando el hematocrito, los glóbulos blancos (WBC) y las plaquetas, así como la hemoglobina y los glóbulos rojos (RBC). Suele ser necesario para obtener una visión general del estado de salud. La HCM no se mide directamente, sino que se calcula a partir del valor de la hemoglobina (Hgb), que es la medida total de la hemoglobina en la sangre, y de los GR, que es el número de glóbulos rojos en la sangre. Para calcular la HCM, la Hgb se divide por el RCB, lo que da una cantidad media de hemoglobina por glóbulo rojo. Los niveles normales de MCH se sitúan entre 26 y 33 picogramos (pg) de hemoglobina por glóbulo rojo.
¿Qué es la MCH elevada y qué puede significar?
Los niveles de MCH superiores a 34 pg suelen considerarse anormalmente elevados. La razón más común para una HCM elevada es la anemia macrocítica, que es un trastorno sanguíneo en el que el cuerpo no produce suficientes glóbulos rojos. En la anemia macrocítica, los glóbulos rojos que se producen son más grandes de lo habitual y cada uno de ellos lleva más hemoglobina de la que llevarían las células de tamaño normal. Esta afección puede estar causada por niveles deficientes de vitamina B-12 o ácido fólico en el organismo; nutrientes que se encuentran en alimentos como el pescado, el hígado, las verduras de hoja verde y los cereales enriquecidos. Estos contribuyen a la producción eficiente de glóbulos rojos y pueden faltar en su dieta, puede que no sea capaz de absorberlos o puede haber otras razones por las que su cuerpo no pueda procesarlos. Los síntomas de la anemia macrocítica pueden incluir:
- Fatiga inexplicable
- Palpitaciones
- Palidez
- Complicaciones cardíacas
Dado que esto puede interferir con la función cardíaca, es importante el diagnóstico temprano de la anemia macrocítica. Otras posibles razones para una prueba de MCH elevada incluyen otras formas de anemia, disfunción tiroidea, quimioterapia, ciertas infecciones, uso excesivo de medicamentos que contienen estrógeno, algunas formas de leucemia y esferocitosis hereditaria; una condición que causa una escasez de glóbulos rojos.
¿Qué pueden indicar los resultados de una prueba de MCH baja?
Los niveles de MCH por debajo de 26 pg se consideran anormalmente bajos. Las causas más comunes de una HCM baja son la pérdida de sangre, la deficiencia de hierro y la anemia microcítica, que es una condición en la que los glóbulos rojos son anormalmente pequeños, llevando menos hemoglobina. Otras causas posibles de una prueba de HCM baja incluyen la hemoglobinopatía, que es un grupo de trastornos que causan cambios en la estructura de la hemoglobina, y la anemia por deficiencia de hierro.
Si le han hecho un hemograma y los resultados muestran niveles de HCM más altos o más bajos de lo normal, se justifica una investigación adicional. Aunque los resultados anormales no son necesariamente una indicación de problemas de salud graves, como se indica en las listas anteriores; pueden ser significativos, por lo que es importante descartarlos. Muchas de las posibles causas de los niveles anormales de MCH requieren tratamiento para proteger la salud y el bienestar, como la anemia u otros trastornos sanguíneos, la enfermedad tiroidea y las deficiencias nutricionales.
Su médico puede determinar la causa de los resultados anormales de MCH con la ayuda de otros componentes del hemograma, como los resultados de MCV, que miden el tamaño medio de los glóbulos rojos, o MCHC, que mide la concentración de hemoglobina. También se pueden realizar análisis de sangre para determinar su estado nutricional para determinar si las deficiencias nutricionales son un problema. Si su médico sospecha que la causa de sus niveles anormales de HCM es una enfermedad de la tiroides, puede ser necesario un análisis de sangre llamado panel de función tiroidea para evaluar la salud y la función de su glándula tiroides. Dependiendo de la evaluación de su estado de salud general y de los síntomas que pueda estar experimentando, su médico puede solicitar otras pruebas para determinar la causa de sus resultados de MCH altos o bajos.
Un hemograma se incluye habitualmente en un análisis de sangre solicitado por su médico durante una revisión anual. También se incluye en este paquete de pruebas estándar un panel metabólico completo (CMP), análisis de orina, hemoglobina A1c y panel de lípidos.